Celaya, Gto., 06 de julio de 2021. ITC/DCD. El Tecnológico Nacional de México en Celaya, cuenta con un considerable acervo artístico conformado por cuarenta y dos obras, entre pinturas, fotografías, murales y esculturas.
Conscientes de la responsabilidad y la importancia en la preservación y conservación de las obras, del 24 al 28 de mayo, se realizaron trabajos de restauración de una de de las obras más emblemáticas con las que cuenta el instituto, el mural “La Evolución del Hombre” de la autoría del pintor y escultor celayense Octavio Ocampo, ubicada en el Centro de Información Jaime Tapia Rodríguez de este instituto.
Los trabajos de restauración se derivaron de algunas diferencias de apariencia en la capa pictórica en algunas zonas, como resultado del diagnóstico realizado se determinó que las manchas no se debían a ningún tipo de ataque bilógico como hongos o bacteria, sino a un cierto deterioro del barniz que el pintor aplicó al terminar la obra o tal vez a que las manchas sean lo que se conoce como pentimentos que son modificaciones que hace el mismo artista y que en este caso el maestro Ocampo después de realizarlas ya no barnizó encima de ellas.
Para poder llevar a cabo los trabajos de restauración de la obra, se informó y solicitó autorización al maestro Octavio Ocampo; las acciones realizadas estuvieron a cargo del licenciado Juan Montoya Polin, Restaurador de bienes inmuebles y consistieron en la limpieza en seco de la obra, aplicación de barniz mate similar al original en toda la superficie del mural para unificar la apariencia de la pintura y a la vez nutrir el barniz debilitado, los trabajos concluyeron de manera satisfactoria y en esta ocasión el maestro Ocampo hizo entrega al TecNM en Celaya, el Certificado de autenticidad de la obra.
La develación del mural se llevó a cabo el 19 de diciembre de 1985, esta obra es un homenaje a la creatividad del hombre, en ella se representan diferentes escenas en la misma superficie; a una distancia de 20 metros se puede observar el ojo del creador supremo y tres caras, la primera de izquierda a derecha es la del Australopitheco, la central es el perfil de Paracelso, padre de la química moderna y la tercera es el rostro de Albert Einstein, a 10 metros de distancia aparece una secuencia de imágenes corriendo a través de su propia evolución desde el origen, terminando con el hombre en el espacio, más cerca el mural se transforma y se puede observar un paisaje que contiene la configuración del planeta, gasificaciones, volcanes, glaciares, vegetación, animales, cuevas con pinturas, casas, la venus de Willendorf, así como distintos utensilios fabricados por el hombre en distintas épocas, en el panel central hay construcciones y esculturas de las culturas Hindú, Olmeca, Maya, Sumaria, Egipcia, Griega y Romana, esta también el arado, la rueda, la polea, la palanca, los números arábigos, romanos, mayas así como el telescopio, el telégrafo, la televisión el pararrayos entre otros, hasta llegar al tercer panel en donde se pueden ver aviones, cohetes a propulsión, naves espaciales…se puede observar el principio de la vida, los átomos y su descomposición, los astros, las estrellas y las galaxias.
Orgullo Lince
